Juego de recorrido cuya meta es ubicar las fichas en los extremos del mismo color, llevándolas con un imán que permite moverlas. Luego de cumplido el objetivo, se da vuelta la tabla y las piezas vuelven a estar desordenadas, comenzando nuevamente del otro lado. El uso de los imanes genera sorpresa a esa edad, haciendo el juego aún más atractivo.
Este laberinto didáctico magnético sirve para el desarrollo cognitivo, la motricidad fina y gruesa. Otro de los beneficios de este juguete es el reconocimiento de colores, convirtiéndolo en uno de los mejores juegos educativos para niños.
Es un juego para niños de 3 a 5 años.
Medidas: Alto: 22 cm.- Largo: 22 cm.- Ancho: 8 cm